Existe un gran consenso a nivel mundial que señala que cada vez serán más las regiones del planeta que vivirá en regiones de estrés hídrico, la escasez de agua en zonas áridas o semiáridas y por ende la buena gestión del agua, es una tarea que no puede ni debe seguir esperando, pero para avanzar, no solo basta con difundir y concientizar la problemática, se requieren acciones y obras concretas.

El proyecto de mantención y/o reparación del Embalse Lautaro o “Lautaro 2.0”, es una iniciativa, que podría ser parte de las medidas necesarias para afrontar el escenario futuro de una mejor forma, desde el año 2014, la Junta de Vigilancia del Río Copiapó ha propuesto progresar en este proyecto a los distintos Gobiernos, quienes, a pesar de sus públicos compromisos, finalmente por uno u otra razón, no han considerado de forma seria avanzar en este proyecto, siendo hoy un tema pendiente. El mejoramiento al Embalse Lautaro permitiría gestionar de forma eficiente las aguas superficiales, generando seguridad de riego anual y a la vez provocando un positivo impacto social y medio ambiental, ya que permitiría que el caudal del Rio Copiapó fuese el eje de una mejor conducción del Recurso hídrico a lo largo del valle de Copiapó.

En este día mundial del agua, como organización encargada de la administración de los derechos sobre las aguas superficiales del Rio Copiapó y sus Afluentes desde 1875, reitera la necesidad de buscar la oportunidad y forma pública y privada para concretar esta iniciativa, dado que es un proyecto estratégico para el desarrollo sostenible del valle de Copiapó.