VALPARAÍSO.- Diputados de la Comisión de Recursos Hídricos y Desertificación recibieron durante la sesión del miércoles, a una delegación de la Junta de Vigilancia del Río Copiapó y sus Afluentes, JVRC, para conocer detalles de la delicada situación hídrica del Valle de Copiapó.
La convocatoria la realizó la semana pasada la Presidenta de la Comisión la diputada Yasna Provoste, luego de conocer detalles del juicio que mantienen la JVRC y Agrícola Hacienda Manflas. En dicha ocasión, la parlamentaria destacó la importancia de que la Comisión conozca lo que ocurre en nuestro valle: “Nos encontramos en el parlamento en la Comisión de Recurso Hídricos, que me corresponde presidir, evaluando las modificaciones a un nuevo Código de Aguas, el cual tiene que considerar aquellos elementos que, en la práctica, nos damos cuenta de que la institucionalidad vigente o que el marco regulatorio no se pone en todos los casos frente a situaciones que son complejas”.
“Es primera vez que en el Congreso Nacional tenemos la posibilidad de hacer visible la realidad del Valle De Copiapó, especialmente de sus afluentes, los que hasta la fecha no cuentan con estaciones de medición de caudales en sus nacientes, lo que dificulta el control y la distribución de las aguas a todos nuestros regantes”, señaló Juan Carlos González, Secretario del Directorio de la JVRC.
Código de Aguas
Durante la reunión, Rodrigo Weisner, abogado patrocinador de la JVRC, detalló los aspectos legales que ponen en riesgo el actual equilibrio en la entrega de Aguas Superficiales en el Valle de Copiapó. Su exposición se centró en el artículo 2° transitorio del Código de Aguas, que reglamenta la regularización de los derechos de aprovechamiento de aguas.
Weisner recalcó que la importancia de la aplicación de dicha norma es que “no afecte el balance que siempre ha existido en la Cuenca del Valle del Copiapó, que ha sido muy pacífica en la distribución de las aguas. Si se regularizan nuevos derechos de aguas, alterando esa distribución y ese equilibrio, podrían generarse graves consecuencias”.
Desde el año 2007, la JVRC ha mantenido un juicio por la solicitud de regularización de derechos de aguas superficiales del Río Manflas, con objeto de que no se siga entregando más agua de la que ya está establecida en la ordenanza de Policía Fluvial de 1875.
A partir del año 1875, los Derechos de Aguas Superficiales han estado sometidos a turno. En este caso, la agrícola pretende regar sus cultivos de forma continua y permanente sin someterse a las directrices que establece la JVRC a todos sus regantes.
El conflicto se produjo cuando la agrícola Hacienda Manflas inició su etapa de regularización de aguas superficiales por 300 litros por segundo, para el riego de sus 250 hectáreas de cultivos de uva de exportación.
Sin embargo, según la JVRC, corresponden solo a 144 acciones, las que corresponden a 24 horas con un quinto de río, cada 14 días, sujetas a turno y establecidas en los Estatutos de la JVRC, lo que equivale a un caudal continuo de 4.2 litros por segundo, lo que dista de los 300 litros por segundo que aluden poseer desde tiempos “inmemoriales”.
En cuanto al aporte de la invitación a la Comisión de Recursos Hídricos, el ex director de la Dirección General de Aguas señaló que se refiere a los cambios normativos que puede generar. “Lo importante es que los diputados están pensando en cambiar la ley para que no vuelvan a ocurrir desbalances en la vía del artículo 2° transitorio. Ellos quieren que a través de la reforma al Código de Aguas eso no vuelva a ocurrir. La posición de la Junta de Vigilancia es que creemos que con la aplicación del derecho tal cual como está no debiese producirse este desbalance”.
Lo que viene
Los parlamentarios asistentes al Comité de Recursos Hídricos, acordaron oficiar a distintas instituciones del Estado para que proporcionen un reporte del estado actual de la cuenca del Copiapó.
Con estas medidas, los diputados esperan conocer en detalle la situación de una zona que, a nivel mundial es reconocida, hasta ahora, por el manejo armónico y sustentable de una cuenca en permanente estado de escasez hídrica.