Un proyecto de desarrollo sostenible, en síntesis, eso es Lautaro 2.0, un proyecto que a pesar de ser una solución 100% de sentido común que hace que el río cumpla con su función natural de ser quien regule la vida y estado de la cuenca, sumado a sus múltiples impactos positivos, beneficios sociales y bajo costo, aún tiene un destino incierto, eso fue lo expuesto por la Junta de Vigilancia del Río Copiapó y sus Afluentes en el FOREDE 2017.

        “A pesar de hoy estar declarado en la política de embalses a nivel nacional, si entre el servicio público y los privados no somos capaces de hacer de este un proyecto región, la iniciativa solo quedara en buenas intenciones” señalo Cristian González, Gerente de la JVRC.

        El grave problema que afecta al Embalse Lautaro es su gran permeabilidad, ya que este se encuentra sobre un depósito de grava y arena, lo que provoca que el 50% del agua no logren ser gestionadas, provocando un uso bastante ineficiente e inequitativo del recurso hídrico. El proyecto no solo es un beneficio para la agricultura, sino que también para mejorar la calidad de vida de los habitantes de Copiapó y Tierra Amarilla.

        Por su parte, Timothy Taffe, Presidente de la Organización, destaco que el mejoramiento del Embalse Lautaro “es proyectar un mejor futuro para todos, dando la real importancia al Río como agente regulador del acuífero”

Objetivo General

        Reparar el Embalse Lautaro, para que pueda asegurar una capacidad de 12 millones m3 que permita una gestión eficiente de las aguas superficiales, velando por un desarrollo sostenible para el valle de Copiapó

Costo aproximado del Proyecto

        25millones de dólares (un 0.5% de lo que produce la Región al año)

Objetivo Específicos

A)   Asegurar la temporada de riego de los usuarios de aguas superficiales todos los años (reparto de 200 l/s por distrito SEP-DIC).

B)   Contribuir a mantener los 20 mil puestos de trabajo directos que genera el sector agrícola del valle en temporada alta.

C)   El Río Copiapó continúa siendo el recargado natural del valle de Copiapó, a lo largo de su recorrido, de forma equitativa durante los 365 días del año.

D)   Permite la coexistencia de la agricultura, la Minería y el cuidado del medio ambiente.

E)    Aumento en la percepción de tranquilidad social, seguridad financiera, dado lo que implica contar con un caudal constante, generando un impacto positivo para ciudadanía y las potenciales futuras inversiones en el valle.

F)    Potenciar la recuperación de ateas sociales de la Ciudad tales como el pretil, el rio en la zona centro de Copiapó y Tierra Amarilla.

G)   Mejorar la calidad de Vida de los habitantes de Copiapó y Tierra Amarilla.